Luis I de España nacido en 1707, hijo de Felipe V, es uno de esos casos en los que, por circustancias, es casi olvidado.
Hoy en historianecdótica recordaremos a este monarca, cuyo reinado duró solo 229 días, conviertiendose así en el rey más efímero de la historia -sin contar con Felipe el Hermoso-.
Luis I de España fue, desde el primer momento, un niño bástante débil, y cuya infancia fue un poco triste. Huerfano desde los siete años, su madrasta Isabel de Farnesio (segunda esposa de Felipe V) siempre lo tuvo en poca estima. Su tutora, la princesa de Ursinos, le aplicó una formación severa que contribuó a agrabar su melancolía. Sin embargo, fue un chico bástante querido por su pueblo, atribuyéndosele el sobrenombre de el "Bien Amado".
Siendo aún adolescente, contrajo matrimonio con Luisa Isabel de Orleans, una muchacha que no era demasiado popular en la corte debido a que protagonizó algunos incidentes, como pasearse sin ropa, eruptar, ventosear en público y síntomas claros de inestabilidad mental.
A los siete meses de haber ascendido al trono, Luis I, contrajo la viruela, muriendo de esta en Agosto de 1722. Tras su muerte, su padre, Felipe V, subió al trono de nuevo.
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