lunes, 14 de septiembre de 2009

La extravagancia de Dalí


Es ya sabido la curiosa personalidad del pintor surrealista Salvador Dalí, pues bien, hoy en historianecdótica recordaremos una anécdota sulla que refleja a la perfección lo estrambótico que era.

Cuentan que, en París, Salvador Dalí decidió visitar a los internos de un centro psiquiatrico. Así, el director se los fue mostrando uno a uno. Abría la puerta de una celda y decía:
- "Este es Napoleón".
- "Poco interesante" -respondió Dalí.
En otra celda más adelante el director abrió la puerta y dijo:
- "Este es el Padre Eterno".
- "Poco interesante" - repuso Dalí nuevamente.
Así fueron pasando celda tras celda. Ninguno le interesaba. Hasta que por fin, al abrirse una puerta de una celda, Dalí vio un rostro prodigiosamente desorbitado, con los ojos saltones y el cabello en desorden. Y exclamó:
- "¡Este, este es un loco genial! Se le nota enseguida".
- "Pero señor Dalí, aquí no hay nadie. Observe usted que está ante el espejo de un armario".